Crees que lo ignoro, porque no hablo del asunto. Piensas que conozco a cada uno de los que han hablado conmigo, aunque sé que no van a desaparecer. Me volverán a ver, después de haberme usado tres meses. Una explicación tan gastada como las suelas de mis zapatos. Cada una de ellas, tiene tantos motivos para odiarme, que no recuerdan la razón. Y no pueden librarse de mí, como no podría librarme de ellas yo. Son mi vanidad, mi envidia, mi desidia, mi ignorancia y mi querida monotonía. No podría deshacerme de ellas de ningún modo, tal vez ni con el sonido hueco, sordo y rápido de un ¡¡¡BANG!!!
3 comentarios
Vale -
Free
teresa -
Vale -